"El Pirineo Navarro, con sus bosques espesos ululantes, y sus cuevas profundas; con sus
altas montañas barridas por las boiras y sus ríos de umbrosos entre peñas tapizadas de musgo,
ha dado a la mitología y a la historia, a la leyenda y a la literatura cuatro figuras a cual
más misteriosa e interesante: el Basajaun y la Lamia, la Bruja y el Contrabandista"
su estructura de grandes piedras, recuerda a la torre de la época
romana de Urkulu.
En Mendilatz encontraron a un bajonavarro cargando oro de una mina que él solo conocía.
Una pista dió... Que desde su entrada se veía el campanario de Orbaizeta.
Nadie ha encontrado el lugar exacto. Pero también en Venta Zabala,
además de ser un importante centro de reunión para arreglar problemas como los de la
fábrica con el Valle o la facería, imitando su vecina fundición, decidieron fabricar moneda falsa. Pero la que aun debe de pasear por las ruinas es una vieja bruja, que seguro que conoce todas las historias que atesoran estas mudas paredes.
Basajaun y Basandere
Hace millones de años este bosque encantado era fondo marino y de esa época aún se
encuentran fósiles en las piedras del camino.
Por sus senderos la leyenda dice que
andaban el Basajaun y la Basandere,
pareja de seres mitológicos que combatían a quienes querían dañar el
bosque y protegían a quienes lo cuidaban.
Adentrarse en Irati, es dejarse llevar por la magia que emana su riqueza
natural.